Accidente cerebrovascular

Nuestro hospital está certificado por la Agencia de Florida para la Administración del Cuidado de la Salud como Centro Integral de Accidentes Cerebrovasculares y por The Joint Commission como centro de accidentes cerebrovasculares apto para trombectomía. Esto demuestra nuestro compromiso de seguir pautas estrictas basadas en evidencia para ayudar a los pacientes a experimentar una mejor calidad de vida después de un accidente cerebrovascular.

Además, somos reconocidos por la Asociación Americana del Corazón y Asociación Estadounidense de Accidentes Cerebrovasculares por brindar atención y tratamiento que conducen a tasas de reingreso más bajas, tasas de supervivencia más altas y resultados significativamente mejores para los pacientes que sufren accidentes cerebrovasculares.

Cuando los servicios médicos de emergencia (EMS) alertan a nuestro equipo de la sala de emergencias (ER) sobre un paciente que experimenta síntomas de accidente cerebrovascular está en camino, notifican de inmediato a nuestro equipo de atención de accidentes cerebrovasculares. Tan pronto como llega el paciente, nuestro equipo de accidentes cerebrovasculares lo evalúa rápidamente y comienza a brindarle el tratamiento necesario. Esto incluye la administración de medicamentos para disolver coágulos o la realización de procedimientos neurológicos que salvan vidas.

Nuestra suite neurointervencionista dedicada

Después del tratamiento, los pacientes son trasladados a nuestra suite de neurointervención, una unidad de atención neurológica especializada y de última generación. Aquí, nuestros neurólogos y neurocirujanos tratan y diagnostican lesiones cerebrales, accidentes cerebrovasculares y aneurismas. Las imágenes neurointervencionistas realizadas en esta sala especializada significan tiempos de procedimiento más cortos, dosis de radiación más bajas y efectos secundarios reducidos del accidente cerebrovascular.

Después de un accidente cerebrovascular, nuestros fisioterapeutas y terapeutas del habla certificados están aquí para ayudarlo a recuperar sus habilidades, fuerza, equilibrio e independencia. Nuestro programa de fisioterapia y rehabilitación incluye terapias físicas, ocupacionales y del habla y el lenguaje personalizadas, además de servicios especializados de asistencia para la voz y la deglución.

Un accidente cerebrovascular es causado por la interrupción del flujo sanguíneo a una parte del cerebro. Cuando se detiene el flujo de sangre, esa parte del cerebro no puede recibir oxígeno y otros nutrientes. Esto hace que las células cerebrales mueran y puede provocar daños permanentes, incluso la muerte.

Hay diferentes tipos de accidentes cerebrovasculares entre los que se encuentran los siguientes:

• Accidente cerebrovascular hemorrágico: cuando un vaso sanguíneo se rompe y la sangre se filtra hacia el cerebro.
• Accidente cerebrovascular isquémico: cuando un coágulo de sangre bloquea el flujo de sangre a una parte del cerebro.
• Ataque isquémico transitorio (AIT) o "mini accidente cerebrovascular": cuando hay una interrupción temporal del flujo sanguíneo a una parte del cerebro.

Es importante poder reconocer los signos de un accidente cerebrovascular para poder actuar rápidamente cuando ocurran. Los síntomas comunes de un accidente cerebrovascular incluyen:

• confusión
• mareo
• pérdida del equilibrio o la coordinación
• entumecimiento, debilitamiento o parálisis de la cara, el brazo o la pierna (especialmente en un lado del cuerpo)
• dolor de cabeza intenso sin causa conocida (puede ir acompañado de dolor en la cara o rigidez en el cuello)
• dificultad para ver en uno o ambos ojos (como visión borrosa, ennegrecida o doble)
• dificultad para hablar
• dificultad para caminar

Los síntomas de un AIT son los mismos que los de un accidente cerebrovascular, pero generalmente estos duran solo unos minutos. Si cree que está sufriendo un accidente cerebrovascular, no conduzca. Llame al 911.

Existen ciertos factores y afecciones que pueden ponerlo en riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular. Sin embargo, algunas de esas afecciones a menudo se pueden tratar. Algunos de los factores de riesgo principales para el accidente cerebrovascular son los siguientes:

• Tener 55 años o más.
• Tener antecedentes familiares de accidentes cerebrovasculares.
• Tener fibrilación auricular (AFib).
• Tener diabetes.
• Tener una cardiopatía.
• Tener presión arterial alta.
• Tener colesterol alto.
• Tener mala circulación.